Advertencias
-En esta parte venimos publicando (Breves
espirituales): diferentes “Secciones” con diversos contenidos
(“Miscelánea”); Y, en el margen derecho, se encuentra el Índice de Temas monográficos tratados con amplitud: La Creación (4cap);
Dios (5cap);
El ser humano (3cap); La Virgen María (4cap); Ángeles
y demonios (4cap); Palabra de Dios (6cap); Sagradas Escrituras (6cap); Libros
de la Biblia (2cap); El reino de Dios (2cap); El Apocalipsis (14cap); La
Oración (14cap); La Resurrección (9cap); Temas varios (27cap)
- Si recibes esta publicación por whatsapp, puedes
acceder a los capítulos de los “Temas”
arriba relacionados en internet:www.pastoralmisioneraeninternet.blogspot.com
Flashes
Bíblicos
-"Dijo Jesús: Escucha, Israel, el Señor, nuestro
Dios, es el único Señor: amarás al Señor, tu Dios, con todo tu corazón, toda tu
alma, toda tu mente, todo tu ser". Y éste":Amarás a tu prójimo como a
ti mismo. No hay mandamiento mayor que estos" -Mc 12,28-
Flashes
de santos y beatos
-Nuestra sabiduría es la locura del Evangelio; la
fuerza es la debilidad de la carne, y la gloria es el escándalo de la cruz.
-San Paulino de Nola-
-San Paulino de Nola-
-La imagen está en el alma y la semejanza en las
obras, pues el alma humana es imagen de Dios y el cuerpo humano, de Cristo.
Todo el que sigue a Jesucristo en su cuerpo, tiene la imagen de Cristo; y
también el alma, la imagen y semejanza con Dios. –Beato de Liébana-,
L. XI-5,11.
Flashes
de Papas
-La devoción a María es la fuente principal de la
renovación de la vida cristiana. -Pío XII, Papa-
Flashes
de Personas destacadas
-Todos tenemos necesidad de conocer más y más a
Jesucristo; conocer más y más la Sagrada Escritura…Que es lo mismo que
decir:”Hay que profundizar más y más la Revelación”. -Mn. Eduardo Vivas-
Flashes
de Enseñanzas
-Que toda tu pequeñez contribuya a que se
santifique el Nombre de Dios. Así la verdad y la santidad resplandecerán sobre
el error y el pecado. Mn. Eduardo Vivas
Enseñanzas
Cristo
vendrá a ti
-Dice el Señor: “El
reino de Dios está dentro de vosotros”.
Conviértete a Dios de todo corazón, y deja
este miserable mundo, y hallará tu alma reposo. Aprende a menospreciar las
cosas exteriores y date a las interiores, y verás que llega a ti el reino de
Dios. Pues el reino de Dios es paz y gozo en el Espíritu Santo.
El amante de Jesús y de la verdad, y el
hombre verdaderamente interior y libre de las aflicciones desordenadas, se
puede volver fácilmente a Dios, y levantarse sobre sí mismo en el espíritu, y
descansar gozosamente. -Tomás de Kempis-
Cultura religiosa, aclaraciones
-San Bernardo fue el gran
enamorado de la Virgen Santísima. Se adelantó en su tiempo a considerarla
medianera de todas las gracias y poderosa intercesora nuestra ante su Hijo
nuestro Señor. A san Bernardo se le deben las últimas palabras de la Salve: “Oh
Clementísima, oh piadosa, oh dulce Virgen María”.
Doctrina
LA DIGNIDAD DE LA PERSONA HUMANA (I)
El pecado
-Creado por Dios en
la justicia, el hombre, sin embargo, por instigación del demonio, en el propio
principio de la historia, abusó de su libertad, levantándose contra Dios y
pretendiendo alcanzar su propio fin al margen de Dios. Conocieron a Dios, pero
no le glorificaron como a Dios. Oscurecieron su estúpido corazón y prefirieron
servir a la criatura, no al Creador. Lo que la revelación divina nos dice
coincide con la experiencia. El hombre, en efecto, cuando examina su corazón,
comprueba su inclinación al mal y se siente anegado por muchos males, que no
pueden tener su origen en su Santo Creador. Al negarse con frecuencia a
reconocer a Dios como su principio, rompe el hombre la debida subordinación a
su fin último y también toda su ordenación, tanto por lo que toca a su propia
persona como a las relaciones con los demás y con el resto de la creación.
Es esto lo que explica la división íntima del hombre. Toda la vida humana, la individual y la colectiva,
se presenta como lucha, y por cierto dramática, entre el bien y el mal, entre
la luz y las tinieblas. Más todavía, el hombre se nota incapaz de domeñar con eficacia por sí solo los
ataques del mal, hasta el punto de sentirse como aherrojado entre cadenas. Pero
el Señor vino en persona para liberar y vigorizar al hombre, renovándole
interiormente y expulsando al “príncipe
de este mundo” (Jn 12,31), que le retenía en
la esclavitud del pecado. El pecado merma al hombre, impidiéndole lograr su
propia plenitud.
A la luz de esta revelación, la sublime vocación y
la miseria profunda que el hombre experimenta hallan simultáneamente su última
explicación.
-Concilio Vaticano
II. Constitución pastoral sobre la Iglesia en el mundo actual.
Cap.I (13)
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«JESUCRISTO
PADECIÓ BAJO EL PODER DE PONCIO PILATO,
FUE
CRUCIFICADO, MUERTO Y SEPULTADO»
116. ¿Contradijo
Jesús la fe de Israel en el Dios Único y Salvador?
Jesús nunca contradijo la fe en un Dios único, ni siquiera cuando cumplía
la obra divina por excelencia, que realizaba las promesas mesiánicas y lo
revelaba como igual a Dios: el perdón de los pecados. La exigencia de Jesús de
creer en Él y convertirse permite entender la trágica incomprensión del
Sanedrín, que juzgó que Jesús merecía la muerte como blasfemo.
117. ¿Quién es responsable de la muerte de
Jesús?
La pasión y muerte de Jesús no pueden ser imputadas indistintamente al
conjunto de los judíos que vivían entonces, ni a los restantes judíos venidos
después. Todo pecador, o sea todo hombre, es realmente causa e instrumento de
los sufrimientos del Redentor; y aún más gravemente son culpables aquellos que
más frecuentemente caen en pecado y se deleitan en los vicios, sobre todo si
son cristianos.
118. ¿Por qué la muerte de Cristo forma parte
del designio de Dios?
Al fin de reconciliar consigo a todos los hombres, destinados a la muerte
a causa del pecado, Dios tomó la amorosa iniciativa de enviar a su Hijo para
que se entregara a la muerte por los pecadores. Anunciada ya en el Antiguo
Testamento, particularmente como sacrificio del Siervo doliente, la muerte de
Jesús tuvo lugar según las Escrituras.
119. ¿De qué modo Cristo se ofreció a sí
mismo al Padre?
-Toda la vida de Cristo es una oblación libre al Padre para dar
cumplimiento a su designio de salvación. Él da «su vida como rescate por
muchos» (Mc 10, 45), y así
reconcilia a toda la humanidad con Dios. Su sufrimiento y su muerte manifiestan
cómo su humanidad fue el instrumento libre y perfecto del Amor divino, que
quiere la salvación de todos los hombres.
-Catecismo de la Iglesia católica. 2ª Sección. Capítulo Segundo: Creo en Jesucristo,
Hijo único de Dios. (587,595,599,606)
Sobre el
Apocalipsis
Ref.- Ap
21, 1-8
-Las aportaciones que incluimos
aquí cobran mayor sentido si antes se han leído en la Biblia los pasajes de la
Ref.
LA RESURRECCIÓN DE LA CARNE
Será el esplendor del estado glorioso, ya que
a nivel universal, por ella la materia adquirirá un nuevo aspecto. Por eso San
Juan habla de cielos nuevos, ya que la resurrección de la carne implica también
que brille en la materia el resplandor de Dios. San Juan habla además de la
tierra nueva, porque el cuerpo humano vuelve a la madre tierra por la muerte, y
nuestra resurrección comportará la glorificación de la misma por obra del
Creador. Por tanto, el primer cielo y la primera tierra adquirirán un nuevo
aspecto, digamos celestial.
Al ser según la Biblia, la ciudad terrenal de
Jerusalén la única Ciudad Santa en el mundo antiguo, por haber sido la elegida
de Dios, por analogía el reino de los cielos recibe el nombre de Nueva
Jerusalén, aquella que desciende de los Cielos. A medida que se contempla la
Jerusalén celestial y se descubren sus perfecciones, mejor se comprende que la
Virgen María vestida de sol, la personifica, otorgándole sus perfecciones, su
espiritualidad. Una gran voz procedente del trono divino -exclamación del
Verbo-, explica que este es el Tabernáculo de Dios con los hombres. Es por
tanto la morada eterna en la que se consuma la Alianza; y es tanta su
perfección que el mal queda definitivamente alejado.
Como que la vida de Dios es infinita, ahí no
cabe límite. En consecuencia por efecto de la glorificación, hace nuevas todas
las cosas y por tanto se vislumbra una génesis del Cuerpo Místico
extraordinariamente fecunda.
Después habla el Padre Celestial expresando
el gozo de encontrarse reunido con todos sus hijos junto al Unigénito,
Jesucristo, reproduciendo su imagen. Es mucho más que una adopción, pues
vivimos, por participación, vida divina auténtica, la propia de la Santísima
Trinidad, lo que implica la divinización del hombre. -Eduardo Vivas y JL-
Flashes
de Salmos
Salmo 85
-Enséñame, Señor, tu camino, para que siga tu
verdad. ®
Oración
breve
-Para que sigamos a Cristo al desierto, y aprendamos de él cómo hemos
de afrontar las tentaciones, sabiendo que nunca somos probados por encima de
nuestras fuerzas.
Oración
«Dios mío, Trinidad a quien adoro... pacifica
mi alma. Haz de ella tu cielo, tu morada amada y el lugar de tu reposo. Que yo
no te deje jamás solo en ella, sino que yo esté allí enteramente, totalmente
despierta en mi fe, en adoración, entregada sin reservas a tu acción
creadora» -Beata Isabel de la Trinidad-
Himno
Sin Ti
Estate,
Señor, conmigo
siempre,
sin jamás partirte,
y,
cuando decidas irte,
llévame,
Señor, contigo;
porque
el pensar que te irás
me
causa un terrible miedo
de
si yo sin ti me quedo,
de
si tú sin mí te vas.
Llévame
en tu compañía,
donde
tú vayas, Jesús,
porque
bien sé que eres tú
la
vida del alma mía;
si
tú vida no me das,
yo
sé que vivir no puedo,
ni
si yo sin ti me quedo,
ni
si tú sin mi te vas.
Por
eso, más que a la muerte,
temo,
Señor, tu partida
y
quiero perder la vida
mil
veces más que perderte;
pues
la inmortal que tú das
sé
que alcanzarla no puedo
cuando
yo sin ti me quedo,
cuando
tú sin mí te vas.
Amén.
Ref.- Distintas
Fuentes. J L, Soldado del reino de Dios y Antonio López
Herrera