viernes, 12 de marzo de 2010

Formación - Serie: “Temas fundamentales”- Palabra de Dios - Sagradas Escrituras ( V I )

PRESENTACIÓNEn los últimos capítulos hemos venido tratando de las Sagradas Escrituras, y seguiremos haciéndolo; pero consideramos llegado el momento de dedicar el presente a lo dicho en el capítulo del 22 de Enero: “Revelación I”, sobre las conclusiones del Concilio Vaticano II acerca de:
LA SAGRADA TRADICIÓN Y EL MAGISTERIO DE LA IGLESIA
El Patrimonio completo de la Revelación lo ha depositado Jesucristo en su Iglesia, para que ésta la ofrezca a la Humanidad con garantías de Verdad. Los hombres, aceptando la Palabra de Dios por boca y autoridad del Magisterio, entran por la senda de la Fe en la cual está inherente la Vida divina que el Padre y el Hijo nos brindan en su Espíritu Santo.
.......... - TRANSMISIÓN DE LA REVELACIÓN DIVINA
Los Apóstoles y sus sucesores, heraldos del Evangelio

Dispuso Dios que todo lo que había revelado para la salvación de los hombres permaneciera íntegro para siempre y se fuera transmitiendo a todas las generaciones. Por ello Cristo Señor, mandó a los Apóstoles que predicaran a todos los hombres el Evangelio, lo cual fue realizado fielmente.
Más, para que el Evangelio se conservara constantemente íntegro y vivo en la Iglesia, los apóstoles dejaron como sucesores suyos a los obispos “entregándoles su propio cargo del magisterio”. Por consiguiente, esta sagrada Tradición y la Sagrada Escritura de ambos Testamentos son como un espejo en el que la Iglesia peregrina en la tierra contempla a Dios, hasta que le sea concedido el verlo cara a cara, tal como es (1ª Jn 3,2).

La Sagrada Tradición
La predicación apostólica, que está expuesta de un modo especial en los libros inspirados, debía conservarse hasta el fin de los tiempos por una sucesión continua. De ahí que los apóstoles, comunicando lo que ellos mismos han recibido, amonestan a los fieles que conserven las tradiciones que han aprendido de palabra o por escrito (2ª Ts 2, 15). Ahora bien, lo que enseñaron los apóstoles encierra todo lo necesario para que el pueblo de Dios viva santamente y aumente su fe, y de esta forma la Iglesia, en su doctrina, en su vida y en su culto perpetúa y transmite a todas las generaciones todo lo que ella es, todo lo que cree.
Esta Tradición, que deriva de los apóstoles, progresa en la Iglesia con la asistencia del Espíritu Santo, puesto que va creciendo en la comprensión de las cosas y de las palabras transmitidas, tendiendo constantemente a la plenitud de la verdad divina, hasta que en ella se cumplan las palabras de Dios.
Las enseñanzas de los Santos Padres testifican la presencia viva de esta Tradición, cuyos tesoros se comunican a la vida de la Iglesia creyente y orante. Por esta Tradición conoce la Iglesia el Canon de los libros sagrados, y la misma Sagrada Escritura se va conociendo en ella más a fondo; y de esta forma Dios, que habló en otro tiempo, habla con la Esposa de su Hijo; y el Espíritu Santo, por quien la voz del Evangelio resuena viva en la Iglesia, va induciendo a los creyentes en la verdad entera y hace que la palabra de Cristo habite en ellos (Col 3, 16).
Mutua relación entre la Sagrada Tradición y la Sagrada Escritura
La Sagrada Tradición y la Sagrada Escritura están íntimamente unidas y compenetradas. Porque surgiendo ambas de la misma fuente, se funden y tienden a un mismo fin. Ya que la Sagrada Escritura es la palabra de Dios en cuanto se consigna por escrito bajo la inspiración del Espíritu Santo, y la sagrada Tradición transmite íntegramente a los sucesores de los apóstoles la palabra de Dios, a ellos confiada por Cristo Señor y por el Espíritu Santo para que, con la luz del Espíritu de la verdad, la guarden fielmente, la expongan y la difundan con su predicación; de donde se sigue que la Iglesia no deriva solamente de la Sagrada Escritura su certeza acerca de todas las verdades reveladas. Por eso se han de recibir y venerar ambas con un mismo espíritu de piedad.

Relación de una y otra con toda la Iglesia y con el Magisterio
La sagrada Tradición y la Sagrada Escritura constituyen un solo depósito sagrado de la palabra de Dios, confiado a la Iglesia, pero el oficio de interpretar auténticamente la palabra de Dios escrita o transmitida ha sido confiado únicamente al Magisterio vivo de la Iglesia, cuya autoridad se ejerce en el nombre de Jesucristo.
Es evidente, por tanto, que la divina Revelación, la sagrada Tradición, la Sagrada Escritura y el Magisterio de la Iglesia, según el designio de Dios, están entrelazados y unidos de tal forma que no tienen consistencia el uno sin los otros, y que juntos, cada uno a su modo, bajo la acción del Espíritu Santo, contribuyen eficazmente a la salvación de las almas.
..........- INSPIRACIÓN DIVINA DE LA SAGRADA ESCRITURA Y SU INTERPRETACIÓN
Se determina la inspiración y la verdad de la Sagrada Escritura
Las verdades reveladas por Dios, que se contienen y manifiestan en la Sagrada Escritura, se consignaron por inspiración del Espíritu Santo. La santa Madre Iglesia, según la fe apostólica, tiene por santos y canónicos los libros enteros del Antiguo y del Nuevo Testamento con todas sus partes, porque escritos bajo la inspiración del Espíritu Santo (Jn 20, 31; 2ª Tm 3, 16; 2ª Pd 1, 19-21; 3, 15-16), tienen a Dios como autor y como tales se le han entregado a la misma Iglesia. Pero en la redacción de los libros sagrados Dios eligió unos hombres, que utilizó usando de sus propias facultades y medios, de forma que, obrando Él en ellos y por ellos, escribieron como verdaderos autores, todo y sólo lo que Él quería.
“Así, pues, toda la Escritura es divinamente inspirada y útil para enseñar, para argüir, para corregir, para educar en la justicia, a fin de que el hombre de Dios sea perfecto y equipado para toda obra buena” (2ª Tm 3, 16-17).Cómo hay que interpretar la Sagrada EscrituraHabiendo, pues, hablado Dios en la Sagrada Escritura por hombres y a la manera humana, para que el intérprete de la Sagrada Escritura comprenda lo que Él quiso comunicarnos, debe investigar con atención qué pretendieron expresar realmente los hagiógrafos y plugo a Dios manifestar con las palabras de ellos.
Hay que atender a los géneros literarios, puesto que la verdad se propone y se expresa de maneras diversas.
Conviene, además, que el intérprete investigue el sentido que intentó expresar y expresó el hagiógrafo en cada circunstancia, según la condición de su tiempo y su cultura.
Y como la Sagrada Escritura hay que leerla e interpretarla con el mismo Espíritu con que se escribió para sacar el sentido exacto de los textos sagrados, hay que atender no menos diligentemente al contenido y a la unidad de toda la Sagrada Escritura, teniendo en cuenta la Tradición viva de toda la Iglesia y la analogía de la fe.
Condescendencia de DiosPorque las palabras de Dios se han hecho semejantes al habla humana, como en otro tiempo el Verbo del Padre Eterno, se hizo semejante a los hombres.---------------
Serie: “Fragmentos bíblicos”........ Sonido...
VENTANA ABIERTA
La Iglesia perseguida
Ataques a los cristianos en PAKISTÁN y en NIGERIA- En la ciudad de Quetta, los “islamistas talibanes” han asaltado las instalaciones de los religiosos salesianos; dos sacerdotes salesianos fueron sacados a rastras y mantenidos de rodillas durante una hora manteniéndolos amenazados con “Kalashnikovs” pegados a sus cabezas. Destruyeron varias habitaciones y la Capilla fue profanada y devastada. Se acercan a los extranjeros o paquistaníes cristianos y les gritan: “¡Conviértete o muere!”. Se despidieron así: “Vamos a volver en unos días, y si queda algún extranjero en Quetta lo cortaremos en pedazos”
- En Nigeria, el domingo 7 Marzo 2010, ataques musulmanes contra cristianos en tres aldeas al sur de Jos, capital de Plateau se cobran más de quinientos muertos.
“Amad a vuestros enemigos y rezad por los que os persiguen” (Mt 5, 44)Serie: “Salmos extractados”
27 SALMO DEL MONJEUna cosa he pedido a Dios, la única que anhelo: morar en la Casa del Señor todos los días de mi vida, gustar la dulzura de su gracia y cuidar de su Tem­plo. El me esconderá en lo oculto de su Tienda.
Serie: “Flashes”El Papa Benedicto XVI propuso la escucha atenta de la Palabra de Dios aclarando que “en el yo aislado no podemos escuchar realmente la Palabra, sino sólo en el nosotros de la Iglesia, en el nosotros de la comunión de los santos”.
Serie: “Enigmas bíblicos”
Respuesta al Nº 26
Mucho ha dado que pensar esta diferencia, llegando a decir los padres de la iglesia que acaso fue porque Dimas hizo penitencia de sus robos, pero es que también se arrepintió Adán. Entonces ¿Dónde está la razón? San Cayetano nos dice que Adán recibió de Dios más beneficios que Dimas pues lo creó con sus propias manos en estado de gracia. Dios sintió tanto la ofensa de Adán que lo desterró del paraíso, y a Dimas por una súplica se lo concedió.
Enigma Nº 27Por operación quirúrgica de Enrique Roldán González, el miembro del equipo que se encarga de esta Sección, se aplaza su continuidad hasta que se produzca la recuperación por todos deseada y pedida al Señor.
Ref.- La Biblia. Concilio Vaticano II. Catecismo de la Iglesia Católica. Editorial EDIBESA: la Biblia en 42 CD´s. Diario ABC. Mn. Eduardo Vivas Llorens. Enrique Roldán González. Guía Rápida Nº 10:”Palabra de Dios. Fe. Sagradas Escrituras”. (J L - Soldado del Reino de Dios-), Antonio López Herrera.

viernes, 5 de marzo de 2010

Formación - Serie: “Temas fundamentales”- Palabra de Dios - Sagradas Escrituras ( V )

.......Sonido......
LA BIBLIA
NUEVO TESTAMENTO

La Buena NuevaA quien estudia el Antiguo Testamento y descubre la espiritualidad que rezuman los Salmos y lo que los profetas enseñaron -rica herencia de la fe de Abraham- se sorprende ante la incomprensión con que fue tratado Jesucristo por parte de Israel.El rechazo de la persona de Jesucristo conllevó el del Reino de los Cielos por Él instaurado y anunciado como Buena Nueva a la humanidad, con lo que Israel se apartó de haber encontrado su esplendor en la Iglesia integrando así el nuevo Pueblo de Dios.Al procurar abarcar a modo de síntesis toda la Biblia en una sola mirada, se percibe que los Evangelios obtienen que el Reino de los Cielos surja de su antiguo seno al cumplirse las Escrituras.

La clave de la verdad está en la Encarnación del Verbo de Dios y en la Resurrección después de la muerte en la Cruz. La clave del error, en el poder de las tinieblas.
Suplemento a los Evangelios
El proceso de la divina revelación fue continuando con los Hechos de los Apóstoles y las Epístolas. En su conjunto se manifiesta el Reino de Dios en los principios de su expansión universal, partiendo de Israel.

Las epístolas de San Pablo se inician con las dos a los Tesalonicenses, escritas durante su segundo viaje apostólico. Siguió la primera a los Corintios, que puede considerarse como su carta magna pastoral. Luego escribió la epístola a los Gálatas y la segunda a los Corintios, ésta de gran valor autobiográfico. Inmediatamente la Epístola a los Romanos, su carta magna sobre la fe. La séptima constituye el catecismo de su doctrina y, como síntesis paulina, la epístola a los Filipenses. Prosigue con dos cartas dirigidas a discípulos suyos, la primera a Timoteo y la otra a Tito; ambas sobre temas de dirección espiritual. Vienen a continuación las tres epístolas de la cautividad: Filemón, Colosenses y Efesios, ésta última carta magna sobre el Cuerpo Místico de Jesucristo. Después, ayudado por discípulos suyos, escribió a los Hebreos, carta magna sobre Jesucristo sumo y eterno sacerdote y, finalmente, la segunda a Timoteo
a modo de testamento espiritual.Las restantes epístolas: la de Santiago y la de Judas Tadeo, de valor profundamente ascético; las dos de San Pedro, escritas desde Roma dirigidas a las Iglesias de Asia. Finalmente las tres de San Juan, redactadas en Éfeso: la primera es eclesial; la segunda, particular; y la tercera, una muestra de veneración a la Virgen María.
El último libro de la Biblia
El Apocalipsis corona toda la Sagrada Escritura; contiene la revelación de Jesucristo resucitado a su Iglesia, proyectándose en la gloria eterna. Por su naturaleza esclarece toda la divina revelación.
A Juan le mandó el Señor escribir (Ap 1, 19), a semejanza de a Moisés en el Sinaí (Ex 17, 14), mandato que se reitera en el encabezamiento de cada una de las cartas a las siete Iglesias.
En el capítulo quinto, el Padre Celestial muestra un libro escrito por el anverso y reverso, sellado con siete sellos, haciendo ademán de entregarlo para que se lea, pero nadie, ni en el cielo ni en la tierra podía, sino el mismo Jesucristo (Ap 5, 1-5). ¿Cuál es la identidad de dicho libro? Consideradas todas las hipótesis, no puede ser otro que la misma Biblia conteniendo la verdad plena de la revelación, la cual, para promulgarse en su verdadero y divino sentido, sólo la Sabiduría del Verbo encarnado, nuestro Redentor glorificado, puede hacer. Y para entenderla en su propia naturaleza, se requiere como condición indispensable la pequeñez de la infancia espiritual, según el Evangelio (Lc 10, 17-22).
Con la apertura del primer sello comienza el Apocalipsis a explicar el sentido divino de la revelación, abarcando en su síntesis desde la predestinación del Verbo Encarnado y el pecado original, hasta el triunfo pleno de su Reino con la glorificación del Pueblo de Dios.
El Cristo de Israel aparece como el Alfa y el Omega.El Apocalipsis, conocido en su verdad, es el libro más luminoso de la Sagrada Escritura, el de su gran síntesis, cuya gracia sapiencial se ordena a confirmar la fe.
En sus dos últimos capítulos el Apocalipsis, al tratar de la Jerusalén Celestial, da a entender el estado de la visión beatífica propio de la eternidad gloriosa y, a la vez, inspira la forma de vida más perfecta que debe alcanzar la Iglesia Peregrina, concordando con Moisés a quien, en el Sinaí, le fue revelada la Alianza con su correspondiente culto propio y exclusivo del Pueblo de Dios, según un modelo celeste.
En verdad se puede considerar el Apocalipsis como el Evangelio de Jesucristo resucitado revelándose a la Iglesia, su Mística Esposa, para que sea santa e inmaculada a su presencia.Nota.- Próximamente editaremos un “monográfico” sobre el Apocalipsis.

Serie: “Fragmentos” Bíblicos........ Sonido . .

Serie: “Salmos extractados”
26 SALMO DEL QUE SE PURIFICA
Escrútame Dios mío, ponme a prueba; pasa por el crisol mi conciencia y mi corazón. Tu amor está delante de mis ojos; mis manos lavo en la inocencia.
Serie: “Flashes”
Nadie puede venir a mí, si no lo atrae el Padre que me ha enviado. Todo el que escucha lo que dice el Padre y aprende viene a mí
(Jn 6, 44-51)VENTANA ABIERTANO SE PUEDEN PROHIBIR LOS CRUCIFIJOS"El Tribunal Europeo de Derechos Humanos, de Estrasburgo, no tiene competencia sobre los asuntos relacionados con la salvaguarda de las tradiciones y cultura nacionales y, por tanto, no puede prohibir que se coloquen crucifijos en las escuelas de Italia". Esta declaración, suscrita por representantes de los 47 países miembros del Consejo de Europa, se realizó en la ciudad suiza de Interlaken, lugar donde se discute la reforma del citado Tribunal.“Amad a vuestros enemigos y rezad por los que os persiguen” (Mt 5, 44)Serie: “Enigmas bíblicos”Respuesta al Nº 25Se dice que están solas porque no se pueden socorrer unas a otras. Lo normal en una sociedad está en el socorro mutuo de los que la componen, esto es ser uno para todos y todos para uno. Sin este socorro mutuo sus componentes serían seres solitarios entre una multitud, al no poder contar con la menor ayuda. Así es en el purgatorio y en el infierno, donde las almas son incapaces de ejecutar obras meritorias por sí mismas, y esa insuficiencia es motivo de aislamiento al no poder darse consuelo unas a otras. Las almas del purgatorio sufren, a veces, de otra soledad, la del olvido de las personas queridas que por el parentesco y amistad puedan socorrer. Preocupémonos en dar consuelo a dichas almas del purgatorio mediante la oración.
Enigma Nº 26
¿Por qué por robar un fruto arrojó Dios a Adán del Paraíso y sin embargo se lo concedió al buen ladrón habiendo cometido muchos robos?
(Ref.- Gn 3, 11 y 17; Lc 23, 39-43)
Ref.- La Biblia. Concilio Vaticano II. Editorial EDIBESA: La Biblia en 42 CD´s. Mn. Eduardo Vivas Llorens. Enrique Roldán González. Guía Rápida Nº 10:”Palabra de Dios. Fe. Sagradas Escrituras”. (J L - Soldado del Reino de Dios-), Antonio López Herrera.