Breves espirituales. “Miscelánea” XXXII

Advertencias

-En el margen derecho se encuentra el Índice de Temas tratados con amplitud.

-En la Sección Doctrina comenzamos una serie sobre “La Divina revelación”

Flashes Bíblicos

-El Espíritu Santo que desciende sobre Jesús vendrá a nosotros a través suyo. -Mt 3,13-17 y Jn 1,32-

Flashes de santos y beatos

- La vocación de seguir definitivamente a Cristo no es una renuncia por heroísmo, sino fruto del encuentro con la fuente del amor y de haber experimentado la gracia de la elección por parte del Señor. -Santa Carmen de Sallés-

-En nuestros sentimientos y en nuestras relaciones con el prójimo hagamos pasar a Dios delante de todo. -Beato Carlos de Foucauld-

Flashes de Papas

La misericordia es la viga maestra que sostiene la vida de la Iglesia. Donde quiera que haya cristianos, cualquiera debería poder encontrar un oasis de misericordia. -Papa Francisco-

Flashes de Personas destacadas

-La paciencia depende de nosotros, el consuelo nos viene de Dios. -David Amado Fernández-

Flashes de Enseñanzas

-Hay que partir de la naturaleza de la Iglesia como Cuerpo Místico de Jesucristo del que somos miembros.

Enseñanzas

- El silencio en la oración

Dios habla en el silencio del corazón; si te pones ante Dios en el silencio y la oración, Dios te hablará. Y sabrás entonces que tú no eres nada. Dios puede llenarte hasta que tú conozcas tu nada, tu vaciedad. Las almas de los grandes orantes son almas de gran silencio. El silencio hace cambiar nuestra visión de las cosas. Tenemos necesidad del silencio para llegar a “tocar” las almas de los demás. Lo esencial no es lo que nosotros decimos, sino lo que Dios dice, lo que nos dice, lo que dice a través de nosotros. En un silencio así, él nos escuchará; en un silencio así, hablará a nuestra alma y escucharemos su voz. -Beata Teresa de Calcuta-

Cultura religiosa, aclaraciones

-San León Magno, convocó el Concilio de Calcedonia en el año 451, donde se definió la doble naturaleza humana y divina de Cristo en una única persona.

Doctrina

LA REVELACIÓN EN SÍ MISMA

Dispuso Dios en su sabiduría revelarse a sí mismo y dar a conocer el misterio de su voluntad (Ef 1,9), mediante el cual los hombres, por medio de Cristo, Verbo encarnado, tienen acceso al Padre en el Espíritu Santo y se hacen consortes de la naturaleza divina (Ef 2,18; 2ª Pedro 1,4).

En consecuencia, por esta revelación Dios invisible (Col 1,15; 1Tim 1,17) habla a los hombres  como amigo, movido por su gran amor (Ex 33,11; Jn 15,14-15) y mora con ellos (Bar 3,38) para invitarlos a la comunicación consigo y recibirlos en su compañía. Este plan de la revelación se realiza  con palabras y gestos intrínsecamente conexos entre sí, de forma que las obras realizadas por Dios en la historia de la salvación manifiestan y confirman la doctrina y los hechos significados por las palabras, y las palabras, por su parte, proclaman las obras y esclarecen el misterio contenido en ellas. Pero la verdad íntima acerca de Dios y acerca de la salvación humana se nos manifiesta por la revelación de Cristo, que es a un tiempo mediador y plenitud de toda la revelación.

-Concilio Vaticano II. Constitución dogmática sobre la Divina Revelación  Capítulo I, 2.

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55. ¿En qué consiste la Providencia divina? 

La divina Providencia consiste en las disposiciones con las que Dios conduce a sus criaturas a la perfección última, a la que Él mismo las ha llamado. Dios es el autor soberano de su designio. Pero para realizarlo se sirve también de la cooperación de sus criaturas, otorgando al mismo tiempo a éstas la dignidad de obrar por sí mismas, de ser causa unas de otras.

56. ¿Cómo colabora el hombre con la Providencia divina?

Dios otorga y pide al hombre, respetando su libertad, que colabore con la Providencia mediante sus acciones, sus oraciones, pero también con sus sufrimientos, suscitando en el hombre «el querer y el obrar según sus misericordiosos designios» (Flp 2, 13).

-Catecismo de la Iglesia católica. 2ª Sección. Capítulo Primero: Creo en Dios, Padre Todopoderoso. (302 y 307)

Sobre el Apocalipsis

Rf.- Apocalipsis 10,8-11 

Misión profética

-La misma voz del cielo ordenó a Juan acercarse al Ángel para recibir el librito abierto. El Ángel le mandó tomarlo y devorarlo, esto es, incorporarlo a su vida interior como quien siente hambre y sed de justicia. Le predice un doble efecto: experimentará en la boca un gusto a miel que sabe a vida eterna dulcísima, pero también le amargará las entrañas. Efectivamente el Apocalipsis ilumina el proceso antagónico de la ciencia del bien y del mal, en cuya encrucijada se halla la humanidad debatiéndose en una singular lucha entre el pecado y la gracia como el gran deseo de salvar al hombre de la potestad del enemigo del Reino de Dios.

Seguidamente se le confió una misión profética: la de anunciar a los pueblos, a los reyes y a las gentes de la tierra que es la hora de salvar la Iglesia, pues aunque lo estrictamente divino de la Iglesia de Jesucristo no puede ser vulnerado por la mano humana, pues es obra de la gracia que se manifestará en la gloria, lo externo de la Iglesia sí que es vulnerable, y es el objetivo de sus perseguidores. Pero por violenta que sea la persecución, es siempre pasajera; por tal motivo, se le asigna  en el Apocalipsis un límite simbólico de tres años y medio.

Lo importante consiste en centrar la mirada hacia el interior de la Iglesia, medir la espiritualidad, purificarla, sostenerla y elevarla. Para llevar a término la misión profética  conferida al Apóstol Juan, en su momento Dios dará a su Iglesia dos testigos, verdaderos mártires, pobres y desprendidos, que profetizarán durante mil doscientos sesenta días, que corresponden al periodo de la persecución. En su momento serán víctimas de la fe.

-Eduardo Vivas y JL-

Flashes de Salmos

Salmo 95

-Contad las maravillas del Señor a todas las naciones. ®

Oración breve

- Líbranos, Señor de las disputas en nuestros hogares y de la guerra entre las naciones.  (MAG)

Oración

-Padre todopoderoso, rico en misericordia, cuando salimos animosos al encuentro de tu Hijo, no permitas que lo impidan los afanes de este mundo; guíanos hasta él con sabiduría divina para que podamos participar plenamente de su vida.

Himno

a los MISIONEROS

Experiencia de Dios fue vuestra ciencia,

su Espíritu veraz os dio a beberla

en la revelación, que es su presencia

en velos de palabra siempre nueva.

Abristeis el camino para hallarla

a todo el que de Dios hambre tenía,

palabra del Señor que, al contemplarla,

enciende nuestras luces que iluminan.

Saber de Dios en vida convertido

es la virtud del justo, que, a su tiempo,

si Dios le dio la luz, fue lo debido

que fuera su verdad, su pensamiento.

En nuestro corazón de criaturas,

nos encendió la luz para esconderla,

que poco puede andar quien anda a oscuras

por sendas de verdad sin poder verla.

Demos gracias a Dios humildemente

y al Hijo, su Verdad, que a todos guía,

dejemos que su Luz, faro esplendente,

nos guíe por el mar de nuestra vida. Amén.

Ref.- Distintas Fuentes. J L, Soldado del reino de Dios y Antonio López Herrera